Pomada De Ajo Y Limón Para Tratar Las Várices

La pomada de ajo y limón para las várices es natural, casera y muy efectiva si se usa con constancia, logrando tener unas piernas jóvenes y bonitas, además de prevenir este molesto y dolorosa problema de circulación.

El ajo y limón son dos alimentos medicinales que destacan por sus increíbles beneficios. Prueba esta increíble pomada y sorpréndete por sus resultados.

Tratamientos naturales para las várices

Para que los tratamientos naturales contra las várices funcionen como se espera, se deben tener en cuenta los siguientes factores:

  • Alimentación equilibrada, rica en frutas y verduras, cereales integrales, legumbres y frutos secos.
  • Ejercicio físico habitual
  • Eliminación de malos hábitos como el tabaco y el alcohol.
  • Evitar estar muchas horas en la misma postura, ya sea sentado o de pie.
  • Uso de ropa y calzado adecuados.
  • Suplementos o plantas medicinales para mejorar la circulación y el retorno venoso.

Además de seguir estas pautas, podemos complementar el tratamiento natural con la pomada de ajo y limón para las várices. Es muy efectiva y lo mejor de todo es que se puede preparar en casa de forma muy económica.

Ingredientes curativos

Para la elaboración de la pomada necesitaremos 5 ingredientes con excelentes propiedades para prevenir y tratar las varices.

  • El ajo es muy efectivo para tratar las várices tanto por fuera como por dentro. Este superalimento tiene un potente efecto vasodilatador y fluidificante de la sangre que favorece la circulación.
  • El limón aporta su contenido de ácido cítrico, además de ser un poderoso antioxidante.
  • El aceite de oliva es la base oleosa de la pomada. Le da una textura de loción para que se pueda aplicar con facilidad en la zona afectada. Además permite la maceración de los ajos, de esta forma no tenemos que usarlos de manera directa. Sus grasas monoinsaturadas nutren la piel en profundidad y evitan la inflamación.
  • El aloe vera es el ingrediente ideal para emulsionar el aceite y facilitar su aplicación, pero también aporta frescor y calma la inflamación. Aporta hidratación y protege la piel del exterior.
  • El aceite esencial de romero es el más efectivo a la hora de mejorar la circulación y favorecer una buena oxigenación de la zona afectada.

Preparación de la pomada de ajo y limón

Ingredientes

  • 10 dientes de ajo
  • Jugo de 1 limón
  • 1 vaso de aceite de oliva (220 ml)
  • 1/2 vaso de gel de aloe vera (100 ml)
  • 20 gotas de aceite esencial de romero

Preparación

  • Pela los ajos y trocealos
  • Exprimer el jugo del limón
  • Introduce los dos ingredientes junto con el aceite de oliva en un frasco de vidrio y agítalo para emulsionarlo. Después ciérralo de forma hermética
  • Deja macerar durante 21 días en un lugar oscuro
  • Cuela el líquido y desecha los ajos
  • Añade al aceite macerado el gel de aloe vera y mezcla para obtener una textura de pomada
  • Incorpora el aceite esencial de romero para mejorar el aroma de la pomada

Aplicación

  • Aplica cada noche antes de dormir. Puedes cubrir con una venda o tela para no manchar la cama.
  • Si el olor no es molesto, puedes repetir la aplicación por la mañana.

Recuerda que el tratamiento es efectivo solo si eres constante y tienes paciencia. Además de ayudar a detener el avance de las várices, es útil para prevenir que las pequeñas arañas vasculares que vayan apareciendo empeoren.