Dulce De Leche Repostero Ideal Para Rellenar Y Decorar Pasteles

El dulce de leche es un dulce tradicional latinoamericano, pero la variante de repostero se refiere a la caramelización de la leche, logrando una consistencia ideal para rellenar y decorar pasteles, ya que es más espeso y se mantiene más firme.

Es más concentrado y su aspecto es ligeramente más oscuro, incluso se le pueden agregar sustancias vegetales para aumentar su consistencia. Es el complemento perfecto para alfajores, obleas, panqueques, tortitas, waffles, helados, pasteles o tortas.

Ingredientes

  • 1 litro de leche entera
  • 1 1/2 tazas de azúcar (300 grs.)
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • 1 cucharadita de bicarbonato de sodio
  • 2 cucharadas de leche
  • 1 cucharadita de maicena

Preparación

1 . En una olla gruesa vierte la leche entera y agrega el azúcar. Cocina a fuego mínimo, la cocción debe ser lenta y requiere que se vaya revolviendo constantemente para que no se quema en el fondo.

Si se forma espuma o pedacitos de leche que se pegan a la olla, retíralos.

Para evitar que la leche se queme en la base sin tener que revolver constantemente, puede agregar canicas de vidrio en la olla. Se moverán a medida que la leche se vaya cocinando y no dejará que se pegue.

2 . Luego de una hora de cocción, agrega la vainilla y el bicarbonato de sodio. Continúa cocinando a fuego mínimo y revolviendo de vez en cuando.

Ten cuidado cuando agregues el bicarbonato de sodio porque podría provocar que se rebase la preparación. Para ello puede apagar el fuego antes de agregarlo y luego encenderlo.

3 . A la hora y media de cocción agrega la maicena previamente disuelta en dos cucharadas de leche fría. Revuelve y cocina por 10 minutos más.

4 . Cuando esté listo el dulce de leche, ponlo en un recipiente para que se enfríe. Cuando baje su temperatura tomará una consistencia más espesa y podrás guardarlo en el refrigerador en un frasco tapado.

Al guardarlo en la nevera, puede que el dulce de leche casero se endurezca. En ese caso solo debes meterlo por unos 20 segundos al microondas y comprobar que se ha ablandado. También puedes dejarlo en baño María hasta que recupere la consistencia más líquida.