Razones Para No Seguir La Moda De Que Tu Mascota Sea Vegana

Si bien el veganismo es una tendencia sustentable, no es bueno para las mascotas.

Las convicciones ideológicas personales no deberían ser impuestas a nuestras mascotas y lamentablemente muchas personas que ya no consumen alimentos de origen animal, han transmitido esto a sus animales, pero la ciencia dice que esto no es bueno para su salud.

La huella de carbono que deja la industria cárnica

Según cifras de la BBC

 entre 2014 y 2017 hacerse vegano, aumentó un 60% en Estados Unidos y con eso también subió el número de personas que cambiaron el régimen alimenticio de sus mascotas a esta nueva opción.

La industria de alimentos para mascotas tiene un gran impacto ambiental. Según Forbes, el 2017 se emitieron 64 millones de toneladas de dióxido de carbono, es decir la emisión de 13 millones de automóviles durante el año.

Esta industria también contamina suelos y cuerpos de agua y erosiona bosques y otros ecosistemas. Por eso los veganos insisten en dejar la industria cárnica, pero eso no es bueno para sus mascotas.

Las consecuencias de hacer que tu mascota sea vegana

Las especies domésticas tienen un acomodo anatómico para alimentarse de productos animales.

Los animales padecen consecuencias graves al privarlos de la alimentación y los nutrientes que ellos requieren. Daniella Dos Santos, presidenta de la Asociación Británica de Veterinarios (BVA, por sus siglas en inglés), declaró:

“Si por tu sistema de creencias personales no quieres consumir ninguna proteína animal, está bien, pero esa dieta no está diseñada para cumplir con los estándares de bienestar de tu mascota”.

Las anemia, una de las consecuencias al hacer vegana a tu mascota

En los casos de perros y gatos, hacerlos veganos, puede provocarles severas anemias, por eso Dos Santos aconseja no hacer esto:

“Los gatos son carnívoros obligados. Necesitan ciertas cantidades de aminoácidos para estar saludables y la falta de estos puede ocasionarles problemas de salud. Por esa razón, no recomendaría una dieta vegetariana, y mucho menos una vegana“.

Incluso en algunos países está penado por ley causar afectaciones nutricionales a los animales. El Reino Unido, por ejemplo, posee una legislación diseñada para salvaguardar el bienestar de los animales en casos como estos.