Los árboles centenarios sin duda son un tesoro que debemos cuidar, y por suerte cada vez hay más iniciativas que buscan preservarlos. Usualmente, cuando un árbol de más de 30 metros de alto y 100 mil kilos de peso está en medio de la ciudad, a muy pocos suele importarle conservar estos monumentos vivos y no dudan en cortarlos. Especialmente cuando se pone en medio del desarrollo de nuevas obras, cambios en el trayecto de próximas autovías o construcción de edificios.
Actualmente, los ayuntamientos prefieren trasladar estos árboles llenos de historia a sitios seguros en vez de simplemente cortarlo. Pero mover un árbol de esta magnitud no significa simplemente arrancarlo y moverlo, pues hay otros factores a considerar al hacerlo: no dañar el árbol y planear la ruta por donde trasladarlo a través de la ciudad.
Como verás en el video, esta travesía implica varias cosas: quitar farolas y semáforos para que el árbol no los quiebre con sus ramas, informar a hospitales y otras instituciones sobre los cierres de calles necesarios para el movimiento, etcétera.
La empresa Enviromental Design movió este árbol, y comienza su proceso por la parte más crítica de todas: desenterrando las raíces. Un sistema de soportes inflables bajo las raíces levanta el árbol y permite trasladarlo pues rodan por la carretera mientras sirve de amortiguación.
En el video a continuación podemos ver uno de los operativos de la empresa: el traslado de un roble de más de 100 años, que tiene un tronco de más de un metro de diámetro y pesa más de 150 mil kilos, por la ciudad de Austin (Texas, Estados Unidos).
Suben el árbol con grúas hasta un camión enorme que lo traslada una nueva ubicación donde se replantará.
